Del laboratorio al punto de venta: la ciencia detrás de los aromas de marca

Nada es casual cuando una tienda huele “a marca”.

Detrás de cada fragancia hay más que una mezcla agradable: hay investigación, ciencia, psicología y estrategia.

El aroma que percibes al entrar en un hotel, una clínica o una boutique fue diseñado cuidadosamente para transmitir emociones, reforzar valores y permanecer en la memoria.

Crear un aroma de marca es casi como diseñar una identidad sonora o visual, solo que aquí el protagonista es invisible… pero inolvidable.

El punto de partida: comprender la esencia de la marca

Antes de crear cualquier fragancia, los especialistas en marketing olfativo y perfumistas comienzan con una pregunta esencial:

¿Qué quiere hacer sentir esta marca?

En esta etapa, se analizan tres elementos clave:

  1. Personalidad de marca: ¿es sofisticada, fresca, natural, tecnológica, artesanal?

  2. Público objetivo: ¿jóvenes, familias, viajeros, profesionales, amantes del lujo?

  3. Espacio o contexto: ¿una tienda cerrada, un lobby, un spa, una sala de espera?

A partir de ahí, se construye el brief olfativo: una especie de guion emocional que define el carácter del aroma.

Un aroma de marca no solo debe gustar —debe comunicar.

El laboratorio: donde nace la fragancia

En el laboratorio, los perfumistas (también llamados narices) trabajan con una paleta de más de 5,000 notas olfativas naturales y sintéticas.

Allí comienzan a combinar moléculas aromáticas con precisión científica hasta lograr un equilibrio perfecto entre lo sensorial y lo funcional.

Los aromas se dividen en notas de salida, corazón y fondo:

  • Notas de salida: las primeras que percibes (cítricas, frescas, ligeras).

  • Notas de corazón: las que definen la personalidad (florales, frutales, especiadas).

  • Notas de fondo: las que permanecen y dan identidad (maderas, ámbar, vainilla, almizcle).

La mezcla pasa por pruebas de intensidad, persistencia y compatibilidad con el espacio. Se mide cómo reacciona en diferentes condiciones de temperatura, ventilación y humedad.

La fragancia se prueba una y otra vez hasta que cumple una meta clara: activar una emoción específica y coherente con la marca.

Ciencia y percepción: el aroma como estímulo emocional

Detrás de cada aroma de marca hay una base científica sólida.

Estudios en neurociencia demuestran que el olfato está conectado directamente con el sistema límbico —la parte del cerebro donde nacen las emociones y los recuerdos.

Por eso, un buen aroma puede:

  • Aumentar la permanencia en tienda hasta un 20%.

  • Mejorar la percepción de calidad del producto.

  • Generar fidelidad emocional, incluso antes de la primera compra.

El cerebro no necesita pensar: siente, asocia y recuerda.

Así, lo que comenzó como una fórmula química se convierte en una experiencia sensorial completa.

Del laboratorio al punto de venta

Una vez lista, la fragancia pasa a la etapa de difusión, donde la tecnología entra en juego.

Existen sistemas que permiten controlar con precisión la cantidad y duración del aroma, adaptándolo a cada espacio:

  • Difusores HVAC que integran la fragancia al aire acondicionado.

  • Nebulizadores fríos que preservan la pureza de los aceites.

  • Equipos programables que garantizan uniformidad durante todo el día.

El objetivo no es saturar, sino envolver sutilmente al visitante, creando un ambiente coherente y memorable.

Cuando todo está en equilibrio —intensidad, emoción y espacio— el aroma se vuelve parte de la experiencia.

Una firma invisible, pero presente en cada respiración.

“El branding visual se ve.
El branding verbal se escucha.
Pero el branding olfativo… se siente.”

El resultado: una identidad que se siente, no solo se ve

Los aromas de marca son una herramienta poderosa de branding emocional.

Transforman los espacios, despiertan recuerdos y generan vínculos duraderos.

Porque una marca que huele a algo único, se graba en la mente y en el corazón.

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1 Comment
marzo 14, 2022

Thank you so much Valentine’s collection, it is absolutely stunning! The flowers were so pretty and the service was exceptional. I can’t thank you enough for the beautiful bouquet and the easy delivery.

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